Cambio o transformación – Según la biblia

Cambio o transformación, ambas forman parte de la vida cotidiana del hombre, las cuales puede llevarlo por un buen camino con Cristo o un desastre total, con una vida llena de violencia, desunión familiar, inconformidad laboral, una economía deprimida sin solución esa incertidumbre lo agobia, ya que no sabe qué y cómo hacer para encontrar la paz y el equilibrio en su vida.

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Cambio o transformación – Según la biblia

En Efesios 4:22 dice: “En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a los deseos engañosos,” y es que para que ocurra un verdadero cambio en nuestras vidas con transformaciones profundas, es necesario que todos y cada uno dejemos atrás todos estos vicios y muchos otros que nos afectan grandemente.

Cuando usted es uno de eso, individuos que son conflictivos por donde se le mire, cuando nadie ni aún sus padres pueden conversar con usted porque es agresivo tanto verbal, como físicamente, y una vez que se da cuenta del error solo da escusas para justificar la mala acción cometida, cuando no se da cuenta de su error y siempre usted tiene la razón, usted necesita ser cambiado.

Pero, tranquilo su vida no está perdida por completo, usted tiene la solución más cerca de lo que se imagina, solo debe poner su verdad delante de Jesucristo, pero hágalo tal cual como es usted, dejemos de mentir, todos y cada uno de nosotros sabemos cuando hacemos algo mal, solo que es sumamente difícil reconocer que somos capaces de dañar a otros.

Qué exige el cambio en nuestras vidas

Muchas veces los cambios exigen en nuestras vidas un equilibrio, una concientización de los que estamos haciendo, cuantas veces no ha llegado a su casa de mal humor por múltiples razones ajenas al hogar, pero es en el hogar donde descarga con gritos, maltratos, y cuando la situación se poden incontrolable solo alcanza a decir no he dormido bien, usted no tiene equilibrio.

Todos debemos buscar el equilibrio por ello Isaías 53: 6-7 dice: “Todos nosotros nos descarriamos como ovejas, cada cual se apartó por su camino; mas Jehová cargó en él el pecado de todos nosotros. Angustiado él, y afligido, no abrió su boca; como cordero fue llevado al matadero; y como oveja delante de sus trasquiladores, enmudeció, y no abrió su boca.”

Nuestro Señor Jesús siempre fue un hombre equilibrado, y nosotros debemos imitarle, en el pasaje anterior observamos que los cambios exigen equilibrio, autodominio en nuestros sentimientos, y lo más importante de todo es que Cristo quiere compartir esto con cada uno de nosotros, pero primero debemos poner en orden nuestras vidas y reconocer y cambiar nuestras faltas.

Una vez que alcancemos este nivel podremos día a día, con Cristo a nuestro lado ir cambiando comportamientos desagradables que solo nos hacen daños a nosotros mismos, en Josué 1:9 dice: “Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas.” Cambiar requiere de esfuerzo y valentía, usted puede.

La transformación y sus tres niveles

Al igual que los cambios, es necesario y elemental la transformación a tal extremo que en 1 Samuel 10:6 dice: “Entonces el Espíritu de Jehová vendrá sobre ti con poder, y profetizarás con ellos, y serás mudado en otro hombre.” Cuando se le da estas señales al rey Saúl, es para indicarle que será transformado, todo lo que Dios toca lo transforma para que sea mejorado.

En nuestras vidas este proceso comienza cuando Cristo empieza a morar en nuestros corazones desde el primer momento de nuestro encuentro, véalo así somos una piedra preciosa que debe ser pulida, y para ello debemos atravesar por tres niveles necesarios en el proceso de transformación como lo son:

1.- Evolución

Cuantas personas no hemos conocido en nuestras vidas que luego de conocer a nuestros Señor Jesucristo han tenido una evolución, significativa en sus vidas, y es porque todo lo decide estar en las manos de nuestros Señor Jesús debe y tiene que ser transformado, moldeado, pulido, y son esos seres que uno admira, porque no es lo que hablan, es el testimonio que dan con su proceder.

En 2 Corintios 3:18 nos indica: “Por tanto, nosotros todos, mirando a cara descubierta como en un espejo la gloria del Señor, somos transformados de gloria en gloria en la misma imagen, como por el Espíritu del Señor.” Leamos en el espíritu y entenderemos, cuando Cristo está en su corazón, lo que se reflejara es la gloria de Dios en usted, porque hay una transformación total.

Entonces hay una evolución en nuestras vidas porque él, Espíritu de Dios mora en nuestros corazones, ya no vivimos en la carne sino ene le espíritu, empezamos a vivir para Cristo y su ministerio, todo aquel que evoluciona pude y debe trabajar en el ministerio de Dios, porque no solo ha cambiado teniendo auto control, sino que en el proceso de transformación comienza a evolucionar.

2.-La evolución que transcurre por medio del proceso de la palabra de Dios

Y es que no puede haber evolución si no renovamos nuestros conocimientos en Romanos 12:2 dice: “No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.” Y la única manera que esto ocurre es cuando escudriñamos las Sagradas Escrituras.

Este otro nivel de transformación, nos permite alinear o ajustar algunos puntos clave con el objetivo de poder desarrollar una moral, visión y acción cien por ciento espiritual, guiada por Dios, con el único objetivo de transformar nuestras vidas para poder gozar de una vida eterna con Cristo en la eternidad, todo es y será entendible en los caminos de Dios, si nos dejamos guiar por Cristo.

Por esto es que en Colosenses 3:10-11 dice: “y revestido del nuevo, el cual conforme a la imagen del que lo creó se va renovando hasta el conocimiento pleno, donde no hay griego ni judío, circuncisión ni incircuncisión, bárbaro ni escita, siervo ni libre, sino que Cristo es el todo, y en todos.” Al leer y entender la biblia no solo nos revestimos, somos transformados y cambiados para bien.

3.- La transformación ante la presencia del Señor

Para entender mejor este nivel es necesario leer 1 Corintios 15:51 que dice: “He aquí, os digo un misterio: No todos dormiremos; pero todos seremos transformados,” y es porque debemos recordar que los muertos en Cristo están durmiendo y en la segunda venida de Cristo ellos resucitaran y todos seremos transformados en por completo con el poder y la gloria de Dios.

Para concluir siempre debemos estar claros que cuando Jesucristo mora en nuestros corazones empiezan los cambios, que permiten reconocer las fallas, y llevamos a los pies de Cristo, para que nos ayude, ya que todo cambio conlleva a que todas las cosas aviejas en nuestras ser pasen y empiece Cristo a obrar y hacerlas nuevas, para ser transformados en totalidad y para siempre.

Las transformaciones le permitirán ser una persona totalmente cambiada, y al llegar a este nivel podemos saber cuál es la perfecta buena y agradable voluntad de Dios, para poder vivir una vida en santidad que nos permitirá, que cuando Cristo venga de nuevo, nos de un cuerpo celestial completamente sano, sin pecado y podremos saber la voluntad de Dios.

Para obtener un cambio o transformación debemos primeramente comprometernos con Dios y su reino, lo cual nos llevara a vivir una vida en santidad como Cristo no los ha pedido cuando dice que seamos santo como él, es santo. Dese la oportunidad de vivir en gloria con Cristo Jesús, no sabotee su proceso de cambio o transformación, todo lo puede en Cristo que le fortalece.

Solo usted y Jesucristo saben si es necesario cambiarle, o transformarle la vida, pero lo que si tenemos claro es que una o las dos acciones, deben ocurrir, en su vida, tan vez sean las dos, para ello entre en un lugar donde nadie el interrumpa y entréguele sus pecados a Cristo, pídale perdón y dígale que lo acepta como su único Señor y Salvador.

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Dra. Mercedes Pérez Sarrameda.

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