La mentira según el profeta Jeremías  y la relación con satanás

La mentira según el profeta Jeremías es un mal que nos aleja de Dios y cada día nos acerca más a satanás, a medida que el individuo miente se acostumbra a ese pecado infernal, hace de la mentira su forma de vivir a tal extremo que lo hace hasta sin darse cuenta, es por ello necesario hacer conciencia de lo que podríamos estar haciendo y frenar por medio de Jesucristo este problema.

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Índice de Contenido
  1. La mentira según el profeta Jeremías  y la relación con satanás
  2. Cómo influye la mentira en nuestras vidas 

La mentira según el profeta Jeremías  y la relación con satanás

La mentira es un pecado que ha venido galopando desde la antigüedad, y dónde se instaura solo hay conflictos y desolación incredulidad, leemos entonces en las Sagradas Escrituras en Jeremías 9:5 que dice: “Y cada uno engaña a su compañero, y ninguno habla verdad; acostumbraron su lengua a hablar mentira, se ocupan de actuar perversamente.” 

Vemos como la mentira y cuando se habla de mentira no existe, menudencia para ella, es decir grande, pequeña, blancas o negras como quiera nuestra sociedad presentarla, mentira, es mentira todas ellas conducen al individuo a un acto de perversidad, engaño y donde siempre está el enemigo acechando y ganando terreno, pasa así ganar almas para el fuego eterno del infierno.

Todo humano debe tener presente lo que en Juan 8:44 dice: “Vosotros sois de vuestro padre el diablo, y los deseos de vuestro padre queréis hacer. Él ha sido homicida desde el principio, y no ha permanecido en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, de suyo habla; porque es mentiroso, y padre de mentira.” Ante esto, de quién eres hijo, de Dios, o de satanás.

Cómo influye la mentira en nuestras vidas 

Como ya hemos escudriñado en las Sagradas Escrituras la mentira es la generadora de todos los males y nos aleja de Dios, si hemos crecido en hogares o adquirimos patrones de conducta mentirosos, Cristo está dispuesto a perdonarnos a llevarnos por el camino de la verdad, recordemos que la única forma de alejarnos del mal es pidiéndole a Jesús, que nos ayude y limpie.

Sumergidos en las mentiras, llega un momento que no somos conscientes, y nos parece que no estamos haciendo nada malo, a su vez decimos y pensamos que es una mentira o es una mentira blanca que no hace daño a nadie, ante ello la biblia dice en Jeremías 9:6 “Su morada está en medio del engaño; por muy engañadores no quisieron conocerme, dice Jehová.”

A la primera persona que le está haciendo daño es a usted mismo, recuerde que cada uno responderá por sus actos, cuando analiza su entorno se da cuenta de que por una mentira se han dañado personas en la droga, porque seguro dicen, yo dejo el vicio cuando quiera no necesito ayuda, familias, porque piensa todo está bien, para que conversar, amigos y vidas en general.

Eso es la mentira más falsa que existe, todos necesitamos la ayuda de Cristo, en nuestras vidas, en nuestra familia, amigo entorno, no se deje engañar, no permita que ese enemigo maléfico siga controlándole con más mentiras, o los falsos profetas, haciéndole creer que usted no le está haciendo daño a nadie y que es un buen ciudadano y con eso es suficiente, despierte es la hora.

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En Jeremías 14:14 dice: “Me dijo entonces Jehová: Falsamente profetizan los profetas en mi nombre; no los envié, ni les mandé, ni les hablé; visión mentirosa, adivinación, vanidad y engaño de su corazón os profetizan.” Ante esto debemos estar atentos ante estos falsos profetas, agarrémonos de Cristo, leamos las Sagradas Escrituras para que no seamos engañados.

Recuerde algo, Cristo, es verdad y nos ha dicho que lo imitemos, además, siempre nos ha demostrado que el no miente, entonces si él, no miente sus hijos no mienten, la mentira es una trampa del enemigo para alejarnos de Dios, su verdad y justicia el Salmo 101:7 nos dice: No habitará dentro de mi casa el que hace fraude; El que habla mentiras no se afirmará delante de mis ojos"

Entonces decir la mentira como tal es desagradar en gran manera a Dios, pero nótese que acertar algo que no es cierto, es mentir, hacer silencio ante un agravio alguna persona conscientes nosotros que lo que se está diciendo es falso es apoyar esa mentira es como si la estuviésemos diciendo también, debemos despertar, ir a los pies de Cristo, alinearnos con el Señor.

En proverbios 6:16-17-18-19 dice para no olvidar jamás, “Seis cosas aborrece Jehová, Y aun siete abomina su alma: Los ojos altivos, la lengua mentirosa, Las manos derramadoras de sangre inocente, El corazón que maquina pensamientos inicuos, Los pies presurosos para correr al mal, El testigo falso que habla mentiras, Y el que siembra discordia entre hermanos.

La mentira según el profeta Jeremías
La mentira según el profeta Jeremías

Tal como se dijo anteriormente, estas cosas desagradan a Dios, y todos y deseamos vivir una vida eterna con él, y no solo eso. sino que deseamos agradarle desde ya, por ello pidámosle que nos ayude a corregir empezando por la mentira, además esta es una gran oportunidad para tener un crecimiento espiritual en Cristo, y alejarnos del maligno.

Para concluir es importante que usted sepa que al mentir está desagradando a Dios, y alegrando al maligno, aunque les cueste, o sienta miedo por el resultado al decir la verdad, hágalo sea valiente como Dios, nos manda, diga siempre la verdad porque a medida que siga mintiendo se va alejando cada vez más y más de nuestro Señor Jesús, él le ama infinitamente.

Recuerde e internalice un falso profeta no es de Dios, un falso profeta es un enviado de nuestro principal enemigo y deje de pensar que se presentará con cachos o con actitud agresiva, que no es descartable, por lo general buscará a ganarse su confianza, y el único objetivo es envolvernos y hacer que Dios, nos descarte de tanta abominación y mentiras cometidas.

A quien lea este mensaje, solo le pido que vaya a un lugar en donde pueda tener una verdadera comunión con Dios, es decir un lugar a solas con Nuestro Señor Jesús y le diga desde su corazón, Señor Jesús perdona mis pecados, por favor te acepto como mi Señor y único Salvador y Señor, entra a mi corazón  escribe mi nombre en el libro de la vida y nunca lo borres amén.

Con esta oración de todo corazón ya usted empezó a cambiar, esto no quiere decir que no tendrá tentaciones, claro, que las tendrá, pero ahora está alguien Poderoso con usted y es Cristo Jesús, y cuando usted clame a él, le defenderá, porque nunca lo abandonará, ya es hora, la venida de Cristo está muy cerca, y solamente usted puede salvar su alma que es tan valiosa para Dios.

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Dra. Mercedes Pérez Sarrameda

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