Agradece a Dios al comenzar y finalizar la jornada - Por qué dar gracias

Agradece a Dios al comenzar y finalizar la jornada porque es importante dar gracias por todo lo que él nos da. Existen muchas razones por las cuales todo ser humano debe dar gracias a Dios, sin embargo podríamos iniciar porque es un ser, lento para la ira y grande en misericordia, siempre nos colma de favores, que nos ama infinitamente y sabemos que todo aquello que ponemos en sus manos es bendecido por él.

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Índice de Contenido
  1.  Agradece a Dios al comenzar y finalizar la jornada - Por qué dar gracias
  2. Porque a la gente se le olvida agradecer
  3. Cómo generar una disciplina de dar gracias a Dios por todo

 Agradece a Dios al comenzar y finalizar la jornada - Por qué dar gracias

Damos las gracias porque es una acción de alegría de satisfacción hacia un favor o acción que recibimos y que ha sido positivo en nuestras vidas, es una respuesta que caracteriza a un corazón humilde, que reconoce las bendiciones y que no se olvidará de las acciones recibidas, para cada uno de nosotros el dar gracias a Dios, debería ser un acto de devoción diaria. 

Agradece a Dios al comenzar y finalizar la jornada, en el Salmo 103:1-2 dice: “Bendice, alma mía, a Jehová, Y bendiga todo mi ser su santo nombre. Bendice, alma mía, a Jehová, Y no olvides ninguno de sus beneficios.” Con tan solo saber y verse con vida cada mañana, es un motivo sublime para dar gracias al Creador por tan delicado regalo, ya que es una oportunidad de vida.

 Agradece a Dios al comenzar y finalizar la jornada
Agradece a Dios al comenzar y finalizar la jornada

Exprese con sus labios esa gratitud, no le dé pena eso es un acto de humildad y reconocer quién tiene el poder de la vida y de la muerte, es reconocer y estar alegre porque el Creador nos da una oportunidad más de vida para hacer cosas buenas, agradables y perfectas para su ministerio que a su vez suman para nuestros tesoros en el cielo y cuando Cristo venga, dará buenas cuentas.

Agradece a Dios al comenzar y finalizar la jornada porque sabemos que Dios es Todopoderoso, que le amamos y nos ama, al poner el inicio de nuestras actividades en sus manos el nos guía para que tengamos la fuerza y el ánimo para hacer todo bien hecho, para que lo hagamos con alegría, es saber que nuestro esfuerzo es guiado por Dios, y trabajas para él.

Agradecer envuelve humildad, alegría, entereza, además de responsabilidad, porque no es solo decir gracias Dios por este día, por los alimentos, o por cualquier otra situación grande o pequeña que nos ocurra, es convertir la palabra en acción, esa alegría al recibir algo, por algo de parte de Dios, aunque no se haya dado es alegría con fe, de que aunque no veas sabe que pasará.

Todos los hijos de Dios debemos, tenemos que hacer de esta acción un proceder diario, pero de nada le sirve hacer las cosas por hacerla o pensando que recibirá una recompensa, debemos dar gracias a Dios, con humildad, de corazón, con sapiencia, es dar gracias porque usted sabe que es Dios, quien ayuda a lograr todas las actividades de su día a día.

Lo que le quiero decir es que le pida a Dios, que limpie su corazón, usted y yo sabemos que Dios, es justo y todo lo que usted haga bien y de corazón él, le dará su recompensa buena, agradable y perfecta, pero usted no haga lo bueno por la recompensa, sino porque quiere agradar a Dios, agradece a Dios al comenzar y finalizar la jornada porque quiere que él, se sienta orgulloso de ti.

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Le invito respetuosamente hacer el siguiente experimento, al finalizar su jornada, siéntese por tres minutos y cuente todos los logros que obtuvo durante el día, situaciones que solo usted sabe que de no haber estado bajo los cuidados de Dios, el enemigo lo hubiese destruido, analice hasta lo que para usted no estuvo tan bueno, ante esto, solo nos queda decir gracias mi Dios.

Porque a la gente se le olvida agradecer

Si usted hiciese una encuesta formal, sobre el por qué no le damos gracias a Dios, te encuentras varias facetas del ser humano, desde aquel individuo que le dice apenado, porque se me olvida, hasta aquel que le dice en forma retorica por qué tú dices eso, yo le doy gracias a Dios todos los días, y cuando continúas conversando te dice es que yo logro todo por mi cuenta.

Dar gracias es una actitud que refleja su paz y felicidad interna, llevándote por ello, a que este acto sea una actitud de acción por reacción, y como ya lo mencionamos no es solo pronunciar la palabra gracias, es actuar bajo la voluntad de Dios y su justicia, para que pueda haber paz y felicidad en tu corazón y vida debe y tiene que entrar Jesucristo en tu corazón.

Y para hacer lo que Dios quiere que hagamos, que siempre es bueno agradable y perfecto, debemos conocerle por medio de nuestro Señor Jesucristo, leyendo la biblia, y recuerde, nada, pero absolutamente nada ocurre porque tenía que pasar, detrás o delante de alguna acción está Dios obrando, para nuestro aprendizaje.

En el salomón 103:2 dice: “Bendice, alma mía, a Jehová, Y no olvides ninguno de sus beneficios.” Dios, nunca se olvida de nosotros entonces, nosotros no debemos olvidarnos jamás de él, agradece a Dios al comenzar y finalizar la jornada, aunque estemos con muchas obligaciones demos la prioridad al Padre, tenemos un Dios maravilloso que nos ama hasta el infinito y más allá.

Sin Dios, no somos nada, él es quien provee todas las cosas, siempre se ha criticado al pueblo de Israel por su comportamiento hacia Dios, después que lo saco de un pueblo en donde eran maltratados, ellos prefirieron protestar y no agradecer las bondades de Dios, la idea de este ejemplo es que nos veamos reflejados allí, solo demos gracias a Dios por todo y reconozcamos su poder.

1 Tesalonicenses 5:18 “Dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús.” Está escrito en las Sagradas Escrituras, es decir es el libro que nos permite conocer a Dios y nos orientan agradecerle en todo, lo bueno y lo no tan bueno, agradece a Dios al comenzar y finalizar la jornada, dale la prioridad y verás cosas maravillosas.

Cómo generar una disciplina de dar gracias a Dios por todo

Primeramente mantengamos en mente lo siguiente, a partir de hoy y para siempre, Dios nos ha dicho en su palabra, que está con nosotros hasta el fin de lo días, y que no nos dejará ni nos desamparará, porque él, nos guarda nos sustenta con su mano derecha, y a su vez nos dice que no temamos, ahora diga usted, no le parece suficiente motivo para dar gracias, solo Dios hace esto.

Abra sus labios y exprese el agradecimiento a Dios, dice la biblia en Hebreos 13:15 “así que ofrezcamos siempre a Dios, por medio de Él, sacrificio de labios que confiesen su nombre.” Ore y alabe a Dios, qué sucede cuando alabamos a Dios, nuestro principal enemigo satanás, se aleja de nosotros porque le atormenta las alabanzas, agradece a Dios al comenzar y finalizar la jornada.

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El enemigo número uno de nosotros no quiere que alabemos a Dios, porque si lo hacemos él, no puede quitarnos nuestras bendiciones, cuando un pueblo o usted como individuo alabar a Dios, ya sea en oración o con cánticos empiezan a suceder cosas maravillosas en la vida de cada uno y en la comunidad cristiana rompiéndose las cadenas que nos atan y frenan las bendiciones.

Declare con su boca por medio de la alabanza y oración en espíritu y verdad, no para que la gente lo vea, es para que la gente vea su buen proceder y quiera que Dios, haga en sus vidas lo que hizo con usted, Dios busca hijos adoradores, entonces adórele, alábele, haga lo máximo por tenerle contento, él merece toda la gratitud, démosle a él toda la gloria y la honra por siempre.

Es hora de la acción, deje a un lado lo que le aleja de su creador, entréguese por completo a él, no crea en cuentos de camino, que usted será aburrido que no se divertirá, con Jesucristo en su vida, usted, será exitoso, querido, se divertirá de verdad con cosas o acciones que le llenen que le den paz espiritual, alegría que siempre se refleja en el exterior de cada uno.

Cuando te entregas en cuerpo, alma, mente y espíritu a Dios, cuando eres un ser humano que agradece a Dios al comenzar y finalizar la jornada, dándole todo el control de tu ser al creador, entonces sucede en ti la voluntad del Padre la cual es buena, agradable y perfecta, somos humanos propensos a pecar siempre, pero tenemos un Dios misericordioso que nos extiende su mano.

Cuando en Romanos 12:1 dice: “así que hermanos os ruego por la misericordia de Dios que presentes vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional” se refiere a que en vida, aparte siempre un tiempo para Dios, busque que Dios, sea su primicia agradece a Dios al comenzar y finalizar la jornada no como un sacrificio, sino con amor.

Para concluir debe saber que la acción de gracias no es un sacrificio, ni una obligación, y mucho menos un acto de interés, la acción de agradecer es un acto sincero alegre lleno de paz, porque sabe que todo lo que tiene, todo lo que es, se lo ha dado Dios de alguna manera es reconocer el poder la gloria y la grandeza de Dios, en nuestras vidas, es saber que sin Dios no somos nada.

No sea malagradecidos, agradece a Dios al comenzar y finalizar la jornada si nunca lo has hecho o lo hacías a media, es hora de poner orden en nuestras vidas, agradécele en cada segundo que pueda, combine su parte de niño, con la experiencia del adulto, observe lo que le rodea todo es para usted, con las cosas buenas y las no tan buenas que están esperando para ser cambiadas.

Alábele porque él, está vivo y le ama, si aun no le conoces es hora de hacerlo no puedes seguir viviendo en este mundo sin saber que Jesucristo el hijo de Dios, te ama y quiere salvar tu alma para la eternidad, ve a un lugar en donde nos seas interrumpido, y estés a solas con Dios, pídele que perdone tus pecados en el nombre de Jesús, y que entre a tu corazón, para siempre.

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Dra. Mercedes Pérez Sarrameda

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