7 buenas oraciones para enterrar las cenizas

Romanos 8:35, 37-39

Padre celestial, tu Palabra dice que nada puede separarnos del amor de Cristo, ni la prueba ni la tribulación. Somos más que vencedores por Ti que nos has amado. Ni la muerte, ni la vida, ni los ángeles, ni los gobernantes, ni las cosas futuras, ni ninguna otra cosa creada. Nada puede separarnos del amor de Dios. Aunque en este momento estoy experimentando esta dolorosa situación, te ruego que durante este entierro de las cenizas, encuentre mi paz al saber que Tu amor eterno estará siempre conmigo, Amén.

Isaías 57:1-2

Señor, ayúdanos en estos momentos difíciles. Aunque los justos perezcan, ayúdanos a no llevar el dolor dentro de nuestro corazón. Los justos son arrebatados para librarlos del mal, así que ayúdanos a recordar que son las cenizas de un individuo en un lugar de paz eterna. Te agradezco que Tu Palabra nos ofrezca el consuelo que necesitamos en este momento. Te agradezco que asegures que los justos encuentren descanso cuando yacen en la muerte, Amén.

Juan 14:1-3

Escucha mi clamor oh Señor, mi corazón está turbado en este momento, pero creo en Ti. Creo que tienes muchas habitaciones en Tu casa del cielo para nosotros. Si no fuera así, no habrías enviado a Tu Hijo a decirle esto a Tu pueblo. Tu Palabra también declara que, debido a esta verdad, volverás y nos llevarás a estar contigo. Así que, durante este entierro de las cenizas, ayuda a mi corazón a encontrar consuelo en saber que, incluso en la muerte, Tú estás con nosotros, Amén.

Eclesiastés 3:1-4

Dios justo, hay un tiempo para cada actividad bajo los cielos: un tiempo para nacer y un tiempo para morir. Ayuda a mi mente a comprender esto mientras lucho por afrontar la realidad de la muerte. Hay un tiempo para plantar, un tiempo para matar, para curar, para derribar, para construir, para reír e incluso para llorar. Hay un tiempo para llorar, pero también hay un tiempo para bailar. Rezo para que haya fuerza en esta época, amén.

1 Tesalonicenses 4:14-17

Oh, Señor, sé que moriste y resucitaste para que los que se han dormido puedan volver a Ti por medio de Jesús. Te doy gracias por el día en que descenderás del cielo con una fuerte orden, con la voz de un arcángel y el sonido de la trompeta de Dios para resucitar a todos los que duermen en Cristo. Durante este entierro de cenizas, sé que la muerte no es el final para Tu pueblo elegido y por ello nos alegramos, Amén.

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Mateo 11:28-30

Dios eterno, gracias por Tu amor incondicional hacia nosotros. Es gracias a Tu amor que puedo acudir a Ti en mi estado de cansancio y carga. Elijo tomar Tu yugo para poder aprender de Ti. Padre, ayúdame a aprender de Ti porque eres manso y humilde de corazón. Durante el entierro de las cenizas de (nombre de la persona), ruego que mi alma encuentre descanso en Ti porque Tu yugo es fácil y Tu carga es ligera, Amén.

2 Corintios 1:3-4

¡Bendito sea Tu Nombre Padre Santo! ¡Tu Palabra declara que eres el Padre de las misericordias y el Dios de todo consuelo! Señor, ahora mismo necesito Tu consuelo divino en este momento difícil. Pero sé que en cualquier pena o aflicción que afronte, Tú eres el consuelo verdadero y permanente. Ni el mundo ni las personas pueden consolarme como Tú. Gracias por Tu amor y protección Gracias por verme en mi dolor y ser mi solución, Amén.