Tomar buenas decisiones – Qué implicaciones tuvo para los personajes bíblicos  

Tomar buenas decisiones es un reto para toda persona pero para los Hijos de Dios es determinante porque tenemos un llamado y un propósito que llevar a cabo, por lo cual nuestro caminar debe ir dirigido por el Espíritu Santo quien mora en nosotros cuando decidimos aceptar y recibir a Jesús como Nuestro Único y Verdadero Salvador.  

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Desde ese momento Dios comienza a transformarnos, renovarnos y nuestra vida ya no vuelve a ser la misma porque un Encuentro con Dios te convierte en una nueva criatura que ahora vive bajo la cobertura del Altísimo. Así que la mejor decisión que podemos tomar es confesar de boca que Cristo es Nuestro Señor y Salvador, y arrepentirnos de todos nuestros pecado. Tal como lo anuncia su palabra:  

“que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo. Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación” (Romanos 10:9-10)

 Tomar buenas decisiones – Qué implicaciones tuvo para los personajes bíblicos 

 Tal como se mencionó anteriormente tomar decisiones acertadas son un verdadero reto para todos, pero para un hijo de Dios puede implicar incluso perder la salvación.  En la palabra podemos encontrar diferentes ejemplos de las consecuencias que puede traernos las malas decisiones: 

 1.- Sansón 

 Sansón, quien nació con un propósito determinado, tenía la misión de derrotar a los filisteos, pero se dejó arrastrar por sus deseos carnales y fue destruido incluso por su propia fuerza. Esto lo podemos ver en el siguiente pasaje: 

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“Sansón oró al SEÑOR así: «Señor DIOS, acuérdate de mí. Te ruego, oh Dios, que me des fuerza una vez más. Déjame hacer algo para castigar a estos filisteos por haberme sacado los ojos». Entonces Sansón tocó con las manos las dos columnas que sostenían el templo.  Apoyándose fuerte contra las columnas dijo: «¡Que muera yo con estos filisteos!» Y Sansón empujó tan fuerte como pudo y todo el templo se derrumbó sobre los dirigentes y la gente que estaba allí. De esta forma, Sansón mató más filisteos cuando murió que cuando estaba vivo” (Jueces 16:28-30)

 Pero cuál fue el error de Sansón, la principal falla fue haber perdido el temor de Dios, revelar su secreto aun cuándo el Señor le dijo que no lo hiciera, es decir, fue desobediente y esto lo llevó a su derrota. 

2.- Salomón 

Por otro lado encontramos las buenas decisiones de Salomón, quien tuvo la oportunidad de pedirle a Dios lo que quisiera, sin embargo le pidió sabiduría y esta se le fue concedida, tal como se puede ver en el siguiente pasaje:  

“Aquella noche Dios se apareció a Salomón y le dijo: Pide lo que quieras que yo te dé. Entonces Salomón dijo a Dios: Tú has mostrado gran misericordia con mi padre David, y me has hecho rey en su lugar. Ahora, oh Señor Dios, tu promesa  a mi padre David se ha cumplido, porque me has hecho rey sobre un pueblo tan numeroso como el polvo de la tierra. Dame ahora sabiduría y conocimiento, para que pueda salir y entrar delante de este pueblo” (2 Crónicas 1: 7-10)

 3.- Esaú 

Otra de las decisiones contraproducentes, fueron las tomadas por Esaú, quien vendió su primogenitura por un plato de granos, por lo cual perdió la bendición de su padre y creó rencillas con su hermano. Esto lo podemos ver en la siguiente cita:  

“Y Jacob respondió: Véndeme en este día tu primogenitura. Entonces dijo Esaú: He aquí yo me voy a morir; ¿para qué, pues, me servirá la primogenitura? Y dijo Jacob: Júramelo en este día. Y él le juró, y vendió a Jacob su primogenitura. Entonces Jacob dio a Esaú pan y del guisado de las lentejas; y él comió y bebió, y se levantó y se fue. Así menospreció Esaú la primogenitura” (Génesis 25:31-34) 

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4.- Sara 

Sara era la esposa de Abraham, quien no podía tener hijos pero Dios le había dado la promesa de que le daría una descendencia aún mayor que las estrellas. Pero ella no creyó en su corazón que eso fuera posible, así que le dio a Agar como mujer a Abraham para que le diera hijos, y de allí nació Ismael. Sin embargo, esto trajo contiendas y Sara decidió echar a Agar junto con su hijo, pero Dios no lo permitió. Esta mala decisión de Sara causó malestar a su vida, aún cuando Dios le otorgó el milagro de ser madre del hijo de la promesa llamado Isaac. Esto lo podemos apreciar en el siguiente pasaje: 

 “Dijo también Dios a Abraham: A Sarai tu mujer no la llamarás Sarai, mas Sara será su nombre. Y la bendeciré, y también te daré de ella hijo; sí, la bendeciré, y vendrá a ser madre de naciones; reyes de pueblos vendrán de ella” (Génesis 17: 15-17)

  5.- David 

David es un gran hombre de la biblia, cuyo corazón era conforme al corazón de Dios. Sin embargo, se dejó llevar por sus deseos carnales y tomó malas decisiones que le acarrearon consecuencias nefastas para su vida, donde perdió a su hijo debido a su adulterio con Betsabeth y al asesinato del esposo de esta mujer llamado Urías. 

Así que tuvo que padecer no solo la muerte de su hijo, sino que tuvo que sufrir persecuciones hasta de su propio hijo Absalón, quien lo quería matar. Así que la vida de David está marcada por muchos errores y decisiones no conformes a la voluntad de Dios. Esto lo podemos apreciar en el siguiente pasaje: 

“ Y el Señor hirió al hijo que la esposa de Urías le había dado a David, de modo que el niño cayó gravemente enfermo. David se puso a rogar a Dios por él; ayunaba y pasaba las noches tirado en el suelo. Los ancianos de su corte iban a verlo y le rogaban que se levantara, pero él se resistía, y aun se negaba a comer con ellos. Siete días después, el niño murió” (2 Samuel 12: 15-18)

En este sentido, la biblia nos revela las consecuencias terribles de tomar decisiones que no están alineadas al propósito que Dios tiene para sus hijos. Para ello tenemos el privilegio de tener el Espíritu Santo en nuestra vida, quien guía nuestros pasos y nos conduce a toda verdad. 

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 ¿Cómo me guío para tomar decisiones según la Biblia? 

 El Señor le dio a la humanidad la libertad de decidir con respecto a la manera en la que dirige su vida. Sin embargo, en la Palabra podemos ver claramente el camino que nos traza Dios para lograr el propósito que él tiene para nuestra vida. Por lo cual es importante que consideres lo siguiente: 

1.- Cuida tu corazón 

Muchas veces nuestras decisiones son tomadas por sentimentalismo y emociones y por eso fallamos y erramos constantemente porque no podemos confiar en el corazón, el cual es engañoso, tal como lo dice la palabra: "Engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso; ¿quién lo conocerá?" (Jeremías 17:9)

Así que debemos cuidar nuestro corazón y mantenerlo conforme a la voluntad del Padre. Del corazón mana nuestra vida y nuestra vida es Cristo. 

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 2.- Firme como la palmera 

La biblia nos demanda que debemos estar firmes a pesar de cualquier adversidad, esto nos va a ayudar a tomar decisiones en medio de la tormenta. Al respecto la palabra nos exhorta de la siguiente manera: “Nadie puede afirmarse por medio de la maldad; Sólo queda firme la raíz de los justos” (Proverbios 12.3) 

 3.- Cuida tu caminar 

 Antes de tomar cualquier decisión debes cuidar nuestro caminar, fijarnos en la manera en la que nos estamos dirigiendo, ya que si perdemos el enfoque, fácilmente nos desviarnos del camino. Debemos estar apercibidos siempre. La biblia nos señala lo siguiente: “El ingenuo cree todo lo que le dicen; El prudente se fija por dónde va” (Proverbios 14.15) 

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 4.- La victoria proviene de Dios 

 Como hijos de Dios debemos estar preparados para actuar confiando en Nuestro Señor en todo momento, sabiendo que él tiene el control de todas las cosas y que la victoria proviene es de él: “Se alista al caballo para el día de la batalla, Pero la victoria depende del SEÑOR”   (Proverbios 21.31) 

5.- Hagamos lo que nos conviene

Aunque vivimos en este mundo, no pertenecemos a él, así que a pesar de que tengamos acceso a todas las cosas, no todo nos conviene y por eso debemos tomar la decisión de apartarnos de aquello que nos aleja de Dios y su propósito en nuestra vida. Por lo cual debemos pedirle discernimiento para saber aquello que aunque nos gusta, nos perjudica. Al respecto la palabra es clara en este aspecto: “Todo está permitido, pero no todo es provechoso.” (1 Corintios 10: 23) 

 En este sentido, tomar buenas decisiones implica tener la disposición de escuchar la voz de Dios mediante la oración, la lectura de la palabra, esa comunión va a determinar que tengamos una vida en victoria, y que tomemos decisiones pertinentes para el propósito al cual hemos sido llamados a cumplir. 

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