Predica Sobre La Visión Espiritual

Para que la vida humana sea feliz, es necesario tener un objetivo en la vida. Para algunos, dicho objetivo se encuentra en el dinero, para otros en el disfrute de los placeres materiales y sensuales, pero todos se desvanece como un sueño. La felicidad perfecta solo puede ser adquirida a través de la conexión con Dios.

Nuestra visión espiritual.

Porque lo que es aún más importante, es que nuestra visión espiritual tiene una relación directa con la manera en que los demás nos ven.

Por ejemplo, si tu visión espiritual es de “Yo soy el pastor y tengo que darle mi opinión al resto de la iglesia”, entonces cuando te vean como un líder autoritario (y no necesariamente malo), ellos automáticamente se sentirán amenazados y desconfiarán de ti. Si tu visión espiritual no te permite ver la totalidad y belleza del amor divino para todos los hombres y mujeres por igual, entonces tus creencias generarán prejuicios contra otros grupos o individuos.

Si tu visión espiritual no te permite ver a Jesús como el modelaje perfecto del hogar cristiano ideal porque siempre está rompiendo las reglas de Su Padre para proporcionarte valores morales básicos sobre cómo debes vivir tu vida en esta tierra – usando Su misma soberanía ante Dios -

entonces puedes llegar a ser cómodamente conformista con los valores locales y sociales dominantes (la mayoría de las veces sin darte cuenta).

¡Y cuando Jesús regrese, quiero ser uno de sus discípulos y seguidores!

Cuando Jesús vuelva, quiero ser uno de sus discípulos y seguidores. Sé que Dios me ama, y también sé que quiere que ame a los demás, para que cuando vuelva por todos nosotros y nos lleve al cielo con Él, podamos estar con Él para siempre.

Cuando Jesús regrese por toda la humanidad en el Día del Juicio, ¿estarás preparado? ¿Habrás aceptado el perdón que sólo está disponible a través de Jesucristo? Si no es así, ¡no te demores! Ahora es el momento de entregarle tu vida para que Él la limpie del pecado y haga una nueva creación en ti (2 Corintios 5:17).

Aun así, él continuaba con todos sus esfuerzos como si estuviera fuerte y sano.

Aun así, él continuaba con todos sus esfuerzos como si estuviera fuerte y sano. Era tan dedicado que no dejó que su enfermedad le impidiera hacer lo que estaba llamado a hacer, y así debemos ser nosotros. Debemos recordar siempre que nuestra vocación viene de Dios, y que nunca es incorrecta o mala para nosotros.

Él vio a los suyos, su familia y su iglesia exactamente como lo hizo Jesús.

Jesús veía a su familia, a su iglesia y a su gente exactamente como los veía Jesús. Los veía como amigos, familia e iglesia. Los amaba con todo su corazón y su alma. Quería estar siempre con ellos, pero sabía que algún día dejaría esta tierra para ir al cielo, pero prometió volver de nuevo en el último día, cuando todos comparezcan ante Dios para ser juzgados.

Él regrese a este lugar.

La forma en la que ves a Jesús determinará cómo lo verás cuando Él regrese a este lugar. Lo que haces aquí determina cómo verás a Jesús en ese momento, así que cualquier cosa que desees para ti y para los demás, la puedes lograr aquí. La forma en la que ves al Señor y te relacionas con Él ahora te dará una visión de Su reino siendo realizado y un mejor entendimiento del plan divino para tu vida.

Cuando pierdes tu visión de Dios, te conviertes en el peor tipo de cristiano posible.

Cuando pierdo mi visión de Dios, me convierto en el peor tipo de cristiano posible.

He aprendido que cuando pierdo mi visión de Dios, ya no soy capaz de ver a las personas de una manera que lo honre. Cuando esto ocurre, tiende a suceder lentamente con el tiempo. Primero puedes empezar a notar que algo de ti mismo no está del todo bien, tal vez estás siendo duro o juzgando a otra persona que es diferente de cómo crees que debería estar viviendo su vida.

Puede que incluso hables con otros sobre cómo esa persona ha "perdido el rumbo" o "ha sido corrompida por la sociedad". También puede ocurrir de forma repentina: puedes ver a alguien haciendo algo completamente fuera de su carácter o enterarte de una situación en la que no había nada que se pudiera haber hecho de forma diferente para cambiar el resultado.

En ambos casos, en lugar de verlos como que han sido heridos (o que han hecho el bien) y entonces necesitan nuestro amor y compasión como Cristo nos ordenó hacer; ¡inmediatamente los juzgamos porque no están a la altura de nuestras expectativas o nivel de comodidad con lo que están haciendo/diciendo/creyendo!

Cuando esto ocurre de forma consistente (y si no nos damos cuenta de lo que está ocurriendo), eventualmente incluso nuestra relación con Dios se vuelve tensa debido a nuestra falta de comprensión/compasión hacia la humanidad - ¡lo que finalmente afecta nuestras relaciones con todos los demás a nuestro alrededor!

Y al igual que ellos, nosotros también tenemos una cita.

• - Debemos tener una visión, como los profetas.
• - Debemos ver a Jesús, como dice Juan en Apocalipsis 1:12-19.
• - Debemos ver a nuestro pueblo, como dijo Pablo a Timoteo (2 Timoteo 2:1-8).
• - Debemos ver el mundo que nos rodea y ser capaces de alinearlo con la voluntad de Dios (Romanos 12:1-2).
• - Debemos ver nuestras iglesias y ponerlas en consonancia con la voluntad de Dios (Efesios 4:11-16).
• - Y lo más importante, debemos ver el futuro que Dios ha planeado para su iglesia.

En primer lugar se nos da poder para ver de una forma nueva, espiritualmente hablando.

En primer lugar, se nos da el poder de ver las cosas de manera diferente. Lo primero que viene a la mente cuando se piensa en la visión espiritual es la capacidad de ver en el reino de los espíritus e interactuar con ángeles y demonios. Aunque esta es una interpretación válida de la visión espiritual, no abarca todos sus significados.

Para entender la visión espiritual en su totalidad, debemos mirar lo que la Biblia dice al respecto. La Biblia dice que "los ojos de nuestro entendimiento" fueron abiertos para que pudiéramos entender lo que Dios ha hecho por nosotros a través de Cristo en la cruz (Efesios 1:18). Así es como nuestros corazones fueron abiertos para que pudiéramos recibir la salvación mediante la fe en Cristo (Efesios 2:8).

Esto también significa que nuestras mentes han sido renovadas por la Palabra de Dios: nuestros pensamientos y actitudes han sido hechos nuevos (Romanos 12:2). En otras palabras, Dios nos ha dado ojos nuevos para que podamos ver las cosas de manera diferente y mejor que antes.

Conclusión

Hoy hemos hablado de la diferencia entre la vista espiritual y la física, de la importancia de la fe en nuestras vidas y de cómo desarrollarla. Espero que lo que hemos hablado les haya animado.

Sección: Estamos hechos a la imagen de Dios, lo que significa que se nos ha dado la vista espiritual. Este don es muy importante porque nos ayuda a ver cosas que no son visibles para nuestros ojos naturales.

Sección: Podemos ver las cosas de manera diferente cuando nos ponemos gafas de fe, y ahí es donde entra la oración. Fortalece nuestra fe a través de la conexión con Dios y nos ayuda a ver más allá de cualquier obstáculo que se interponga entre nosotros y Él.

Sección: La oración es como ponerse las gafas, pero también hay momentos en los que puede parecer que nos las quitamos. En otras palabras, no tengas miedo de dejar de lado tu propia agenda para lo que quieres que Dios haga por ti; ¡Él sabe más!

Para llevar: Confío en que utilices estas ideas como medio para desarrollar tu fe de tal manera que se convierta en parte de tu vida diaria, no sólo una actividad o experiencia ocasional durante los servicios de la iglesia o en casa a solas con Dios (aunque ambos lugares pueden ofrecer maravillosas oportunidades).

¡Hasta la vista! Gracias de nuevo a todos 🙂 - Pastor Adrián Castelló

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