Predica Sobre La Paciencia

La paciencia es la capacidad de absorber problemas y tensiones sin quejarse, y no verse afectado por los obstáculos, los retrasos y los fracasos. Según la Palabra de Dios, nuestra vida se debe caracterizar por la paciencia

¿Cuál es la paciencia?

La paciencia es la virtud que nos permite soportar los problemas sin perder la calma, no importa cuánto dure.

Las pruebas sirven para poder mejorar, la paciencia es la virtud que nos ayuda a soportar las pruebas.

Dios nos prueba porque quiere enseñarnos que si tenemos paciencia podemos afrontar cualquier situación en nuestra vida y si no tenemos paciencia podemos convertirnos en personas irascibles y malas persona.

Algunos puntos más a tratar en esta sección son:

¿Que son las pruebas?

Las pruebas son las cosas que pasan en nuestra vida.

Pero, ¿cómo podemos saber cuándo estamos siendo probados? La Biblia dice: “No nos hagamos pruebas los unos a los otros” (1 Corintios 10:13). Si no hay motivo para creer que alguien está tratando de probar nuestra fe o paciencia o bondad, entonces no es necesario ser testigos de ello.

Pero si se sabe que hay una persona que busca probarte (tal como el fariseo), se puede actuar en consecuencia y mantener suficiente control sobre sus emociones como para decir la verdad sin acusaciones y sin desquitarse.

Es importante recordar que Dios usa a otros para probarnos y sugieren estas palabras del apóstol Pablo:

“La paciencia es la virtud que soporta las dificultades; la convierte en fortaleza frente a las tribulaciones” (2 Timoteo 4:5).

¿Por qué se nos prueban?

Creo que la razón por la cual Dios nos hace vivir difíciles situaciones es para ayudarnos a crecer y aprender, haciéndonos confiar en el Señor, ser pacientes y amables con los demás. Esto también nos ayuda a ser más perdonadores con los demás.

¿Qué es la misericordia?

La misericordia es una de las virtudes teologales, que son las cualidades adquiridas por la fe y la caridad. Es una de las virtudes cardinales, que son aquellas que se usan para dirigirnos a Dios y al prójimo.

La misericordia es el don gratuito de Dios, que nos da su perdón siempre que lo necesitemos; por tanto la misericordia no depende de nuestras acciones, sino del amor puro y perfecto de nuestro Padre celestial.

Mi consejo: aprende a hacerte consciente de tu necesidad continua de la misericordia divina en tu vida diaria como herramienta principal para superar los obstáculos y temores que te impiden ser feliz.

Ejemplo de una persona que fue paciente

Se pueden encontrar ejemplos de personas que han sido pacientes y otras que no lo han sido. Una persona paciente es aquella que espera sin desesperarse, mientras una persona no paciente es aquella que se irrita fácilmente y actúa de forma precipitada. Si usted tiene un problema, la mejor solución es ser paciente y buscar una solución lógica para resolverlo en vez de actuar impulsivamente.

• Conclusión: El resultado final de estar tranquilo y controlado es vivir una vida feliz y saludable sin ningún problema. Sin embargo, si usted se irrita con facilidad o actúa impulsivamente como consecuencia de su temperamento tal vez sea difícil para usted desarrollar la capacidad de ser pacientes. Parafraseando aquello tan célebre dicho por Benjamin Franklin: “Nunca digas nunca” (y no confundir con “nunca digas jamás”).

Debemos ser muy pacientes en.

Debemos ser pacientes en todo lo que hacemos. Podemos utilizar nuestras pruebas para crecer y con la ayuda de nuestro maestro podemos tener una vida feliz.

Debemos ser muy pacientes con las personas que padecen diferentes enfermedades, especialmente si llevan mucho tiempo sufriendo. Esto se debe a que hay algunas pruebas que Dios nos da y que son necesarias para que pasemos en este mundo, para que cuando volvamos a casa, al Cielo, Dios diga:

 "¡Bien hecho, mi buen y fiel servidor! Entra en mi alegría". (Mateo 25:21).

Cuando Jesús estuvo en la tierra, dio un ejemplo de cómo debemos ser pacientes: "Entonces Pedro se acercó a él [a Jesús] y le dijo:

Señor, ¿cuántas veces me ofenderá mi hermano y le perdonaré? hasta siete veces. Jesús le dijo: No te digo hasta siete veces, sino hasta setenta veces siete... Si perdonáis a los hombres sus ofensas, vuestro Padre celestial también os perdonará a vosotros" (Mateo 18:21-22).

Conclusión

Este fue un post breve sobre el ayuno, espero que te sirva para tu día a día y no olvides dejar en los comentarios tu opinión. Recuerda que también puedes comunicarte con nosotros en Twitter, Facebook e Instagram.

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