Predica - La Voluntad De Dios

Hay dos cosas que me gustan de la Biblia: es un libro de verdad y es un libro de ánimo. Esto no significa que sus páginas no contengan dificultades o sinsabores, sino que en sus páginas encontramos tanto la verdad sobre la vida como la forma de vivirla bien.

Algunas personas piensan que estas dos ideas deben ser mutuamente excluyentes: que vivir según la voluntad de Dios significa que debemos prepararnos para algún tipo de tragedia o momento difícil en nuestras vidas.

Pero, ¿y si hubiera una forma de vivir nuestra mejor vida ahora mismo? ¿Y si la obediencia a Dios nos llevara por caminos marcados por el crecimiento en lugar del dolor?

Introducción

Es importante recordar que la introducción no es un lugar para dar la historia de tu vida. Si quieres hablar de ti mismo, guárdalo para el final o la mitad del sermón.

Tu introducción debe ser un gancho que capte la atención de tus oyentes y les haga querer escuchar más. Debe ser breve y concisa, pero también lo suficientemente atractiva para que la gente quiera escuchar lo que sigue.

La introducción debe comenzar con "yo" (porque así es como hablamos) y terminar en tiempo presente (porque esto es lo que sucede ahora).

Verso temático

La Biblia es la palabra de Dios y es la fuente de toda verdad. La Biblia es la única fuente de la verdad. La Biblia es la palabra de Dios.

Vamos a ver algunos versículos que nos enseñan sobre la predicación del evangelio y cómo se relaciona con usted y su vida ahora mismo.

Definición de la voluntad

La definición de voluntad es la capacidad de tomar decisiones y elegir. También son tus intenciones, deseos y objetivos. La voluntad es el poder interno que te motiva a actuar de forma coherente con lo que más te importa en la vida.

Cuando se trata de la voluntad de Dios, nada puede ser más sencillo que averiguar lo que Él quiere que hagamos:

"Porque yo sé los planes que tengo para ti -declara Yahveh-, planes de prosperidad y no de maldad" (Jeremías 29:11).

Obediencia a la Palabra de Dios

Para entender la voluntad de Dios, primero debemos conocer lo que dice su Palabra. La Biblia es la máxima autoridad en todos los asuntos de la vida. No basta con leerla; debemos obedecerla.

El apóstol Pablo escribió: "Toda la Escritura es inspirada por Dios y es útil para enseñar, para reprender, para corregir y para instruir en la justicia" (2 Timoteo 3:16).

La obediencia a la Palabra de Dios no es sólo una opción; ¡es un mandato! No podemos vivir de acuerdo con la voluntad de Dios si no obedecemos su Palabra.

Hágase Su Voluntad en la Tierra

Si quieres conocer la voluntad de Dios para tu vida, entonces debes aprender primero la Palabra de Dios. Debes escuchar Su voz y seguir Sus mandatos. Él nos ha dicho cómo quiere que vivamos nuestras vidas aquí en la tierra, y si no lo escuchamos o lo obedecemos, entonces nuestras oraciones no serán respondidas porque no estamos haciendo lo que Él quiere que hagamos.

No podemos esperar nada de Dios si no estamos dispuestos a obedecerle primero. Podemos saber qué tipo de vida quiere Dios para cada uno de nosotros leyendo Su Palabra en la Biblia (el Libro Sagrado).

El libro de los Proverbios nos dice que "El temor del Señor es el principio del conocimiento".

Esto significa que si le tememos y obedecemos Su palabra entonces ganaremos sabiduría de ella que nos llevará más cerca de saber qué es exactamente lo que está pasando dentro de nuestros corazones y mentes para que se conviertan en recipientes puros usados sólo por Él.

En lugar de usarlos en contra de sus deseos como un opositor tratando de tomar el control sobre ellos en lugar de usarlos en contra de Sus deseos como un opositor tratando de tomar el control sobre ellos en lugar de usar

Conclusión

La conclusión es que debemos ser obedientes a la voluntad de Dios en nuestras vidas. Debemos escuchar Su Palabra y obedecerla. Debemos ser cambiados por la Palabra de Dios para que podamos vivir de acuerdo a Su voluntad en nuestras vidas diarias. Como cristianos, se nos conoce mejor por el fruto de nuestras vidas.

Vivir de acuerdo a la voluntad de Dios significa vivir una vida de obediencia a Él. Como cristianos, somos embajadores de Cristo cuando vivimos una vida de obediencia y fidelidad (2 Corintios 5:20). Si quieres que tu vida cuente para algo en este mundo, entonces tienes que aprender a vivir según la voluntad de Dios.

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