De Qué Trata El Salmo 130:5 Significado Y Enseñanza

Dios es Dios, y él solo conoce todas las respuestas. Y esa verdad opera en nuestra vida diariamente. Sea cual fuere tu situación o circunstancias… nunca, nunca te pierdas de vista que Él sabe lo que hace en tu vida. Jehová conoce tus problemas y tiene un plan para ayudarte a superarlos y salir adelante por la gracia de Cristo Jesús.

Índice de Contenido
  1. El Salmo 130 o Salmo de las alabanzas de David
  2. Este salmo es tan corto como rico en contenido.
  3. Se relaciona con ese momento del hombre cuando se encuentra sin fuerzas y todo ha terminado.
  4. David reconocía la verdad.
  5. No existe otro camino cuando se han agotado todas las fuerzas humanas.
  6. Conclusión

El Salmo 130 o Salmo de las alabanzas de David

Este salmo habla del perdón y la misericordia que sólo puede encontrarse en Dios. El Salmo 130 o Salmo de las alabanzas de David, habla del perdón y la misericordia que sólo puede encontrarse en Dios.

El salmista menciona que nadie es como el Señor, ya que Él es bueno y Su bondad permanece para siempre. El salmista también dice que los juicios del Señor son rectos y justos, Él es un Dios misericordioso.

Este salmo es tan corto como rico en contenido.

  • Este salmo es tan corto y poderoso que vale la pena repetirlo:
  • - Los versos 5-6 son los versos clave de este salmo.
  • - El verso 5 es el verso principal del salmo, pero también contiene en sí mismo varias verdades importantes que te ayudarán a empezar a entender lo poderoso que es realmente este pequeño trozo de la Escritura.

Aunque la nieve cubra los montes y el viento sea despiadado en las acequias, no temeré lo que a mí alrededor acontezca; porque tú estás presente en todas partes y guías mis pasos. Tus manos me sostienen y me consuelan cuando me encuentro triste o deprimido; tu poder ha sido siempre conmigo y has salvado mi vida en la hora más difícil.

Se relaciona con ese momento del hombre cuando se encuentra sin fuerzas y todo ha terminado.

Pero lo que encontramos en realidad se relaciona con ese momento del hombre cuando se encuentra sin fuerzas y todo ha terminado. David pudo decir cosas grandes como esta porque reconocía todos los días la verdad de esta afirmación. A veces nosotros no sabemos cómo pedir perdón a Dios por nuestros pecados o cómo llegar a Él cuando estamos lejos.

No tenemos el corazón abierto para escuchar Su voz ni un espíritu honesto que nos dé la posibilidad de recibirlo en nuestros corazones, pero David sí lo hizo. Por eso fue capaz de entrar en las realidades más profundas del carácter humano y declararlas ante Dios con total sinceridad y humildad; él era capaz de reconocer que estaba allí desvalidamente, necesitaba absolutamente su ayuda y amor para vivir bien su vida y cumplir sus propósitos

David reconocía la verdad.

David era un hombre de fe. También era un hombre que rezaba. David vivía su vida en la presencia de Dios, y por lo tanto podía decir cosas grandes como esta porque conocía la verdad detrás de ella.

¿Pero cómo llegó a conocer esta verdad? Comenzó con la convicción de su pecado y con el hecho de acudir a Dios en busca de misericordia y salvación, lo que le llevó a una relación diaria con Él a través de la oración.

La presencia de Dios es lo que nos da confianza, no sólo en nosotros mismos, sino también en Él. ¿Cómo podemos esperar algo de nosotros mismos si primero no reconocemos nuestra necesidad de la ayuda de Dios?

No existe otro camino cuando se han agotado todas las fuerzas humanas.

No hay otro camino cuando se han agotado todas las fuerzas humanas. No es en vano que el Salmo 130:5 diga que hay “nada bueno” en nosotros, porque es por nuestra propia cuenta que no podemos lograr nada. Sin embargo, es precisamente a este punto donde Dios revela su poder al salvar al hombre de sus propias limitaciones y carencias para llevarlo a una situación de abundancia incomparable con la que jamás se hubiera podido imaginar sin Él (Salmo 34:10).

Nuestro orgullo quiere muchas veces hacer creer al mundo que tenemos los medios para solucionar nuestras problemáticas personales sin necesidad de acudir a Dios; pero el hecho es que ni siquiera tenemos la capacidad ni los recursos para solucionar nuestros mismos problemas, mucho menos los del prójimo.

Es aquí cuando se demuestra que no existe otro camino cuando se han agotado todas las fuerzas humanas y solo queda confiar en Dios:

“…si confiamos en Él para lo pequeño ¿cómo no vamos a confiarle lo grande?” (1 Juan 5:14).

Aunque tenemos una vaga imagen de lo que tenemos bajo nuestros pies, el hecho de que no somos más que polvo ciertamente tiene un impacto en cómo nos vemos a nosotros mismos.

Aunque sea difícil de imaginar, hay una verdad inconmensurable en esa afirmación. Estamos hechos de polvo y, como tal, nunca podremos ser más de lo que Dios nos creó.

Sin Dios y su amor, misericordia y gracia; sin el perdón; sin todas estas cosas, dejaríamos de existir. No somos nada sin Él.

Conclusión

Este salmo tan práctico nos recordará siempre que cuando hayamos agotado todas nuestras energías, la única opción que nos queda es poner nuestra confianza en Dios. El gran problema de tener que depender de alguien más no es si podemos o no podemos, sino si estamos dispuesto a depender de él. Y esto es lo que nos dice David y el Salmo 130:5 significado y enseñanza: “En ti, oh Jehová, he puesto mi confianza”.

Si quieres conocer otros artículos parecidos a De Qué Trata El Salmo 130:5 Significado Y Enseñanza puedes visitar la categoría Salmos.

¡Más Contenido!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Subir