En El Reino De Dios Hay Residentes Temporales O Permanentes

Muchas personas creen que hay "residentes temporales" en el reino de Dios. Algunos dicen que uno puede tener su nombre escrito en el libro de la vida y luego perderlo, pero esto no parece ser cierto.

Ya hemos hablado de que ser ciudadano del Cielo es un estatus permanente; no podemos perder nuestra ciudadanía aunque pequemos (Hebreos 10:26-27). La pregunta es si hay ciudadanos temporales o condicionales a los que se les conceden derechos mientras no pequen. ¿Existen ejemplos bíblicos?

En esta entrada consideraremos varias Escrituras que parecen sugerir que algunas personas pueden entrar o salir del Reino en función de su comportamiento durante su vida.

Efesios 2:19 dice: "Así que ya no sois extranjeros ni forasteros, sino conciudadanos de los santos y miembros de la familia de Dios".

La Biblia dice que ya no somos extranjeros ni forasteros, sino conciudadanos de los santos y miembros de la familia de Dios. En otras palabras, nos hemos convertido en residentes permanentes en el Reino de los Cielos.

Así que puedes ver que no hay residentes temporales o permanentes en el Reino de Dios; todos somos ciudadanos porque Jesús pagó por nuestros pecados a través de su muerte en la cruz como nuestro sustituto (Romanos 5:8).

También podemos estar "cargando" este cuerpo de carne para ser juzgados después por Dios. 1 Corintios 5:10

También podemos estar "cargando" este cuerpo de carne para ser juzgados más tarde por Dios. 1 Corintios 5:10

Podemos llevar este cuerpo de carne para ser juzgados más tarde por Dios. Este cuerpo de carne no es nuestro verdadero cuerpo, es el cuerpo de pecado que llevamos con nosotros, pero tampoco es nuestro. Por eso necesitamos arrepentirnos porque llevamos esto con nosotros hasta que Dios decida qué hacer con él.

En el sentido espiritual, hemos sido bautizados en el reino. Colosenses 1:13

Nota que se dice que fuimos trasladados al Reino - no que lo seremos. Ahora, usted se preguntará por qué no se dice que somos ciudadanos del reino. La respuesta es que la Biblia nunca utiliza los términos "ciudadano" o "residencia" en relación con el reino de Dios.

En cambio, somos bautizados en él (Colosenses 1:13), trasladados a él (Juan 3:3), hechos ciudadanos de él (1 Pedro 2:9), miembros de él (Colosenses 1:18; Efesios 5:30; Hebreos 12:23), e incluso miembros de la casa de Dios (1 Pedro 2:5).

Dios ha derribado el muro de separación entre nosotros y las demás naciones. No está señalando a ninguna nación o persona.

Dios ha derribado el muro de separación entre nosotros y las demás naciones. No está señalando a ninguna nación o persona. Dios dice que él mismo es nuestra paz, y que por su sangre nos hizo uno con los demás y con él (Efesios 2:14) . Ya no somos extranjeros ni forasteros, sino conciudadanos de los santos y miembros de la familia de Dios (Efesios 2:19).

Efesios 2:14 Dice que él mismo es nuestra paz.

Cuando nacimos de nuevo, el Espíritu de Dios vino a vivir dentro de nosotros. (1 Corintios 6:19).Tu cuerpo es un templo que alberga tu alma y tu mente. Como tal, debe ser tratado con respeto y cuidado porque merece el mejor tratamiento posible para que usted pueda rendir al máximo no sólo físicamente sino también mentalmente, emocionalmente y espiritualmente.

Cuanta más atención le prestes comiendo alimentos sanos, haciendo ejercicio con regularidad, relajándote de vez en cuando (aunque no demasiado), tomando vitaminas o suplementos si los necesitas, etc., mejor te sentirás tanto en el día a día como en las situaciones de estrés cuando algo no vaya según lo previsto, por ejemplo, los exámenes en la escuela o la universidad.

No hay residentes temporales en el Reino de Dios

La respuesta a la pregunta es sí, hay residentes temporales en el reino de Dios. No somos residentes; ¡somos ciudadanos! Pertenecemos aquí y ahora. No hay una vida después de dejar este mundo que nos dé una mejor oportunidad en el cielo o en el infierno. La Biblia deja claro que no hay una segunda oportunidad después de la muerte:

1 Corintios 15:12-28 (NVI) "Ahora bien, si se proclama que Cristo ha resucitado de entre los muertos, ¿cómo pueden algunos de ustedes decir que no hay resurrección de los muertos? Si no hay resurrección de los muertos, entonces ni siquiera Cristo ha resucitado. Porque si los muertos no han resucitado, tampoco Cristo ha resucitado; y si Cristo no ha resucitado, entonces nuestro anuncio ha sido vano y vuestra fe ha sido vana."

Conclusión

Independientemente de lo que ocurra en este mundo, podemos estar seguros de que somos ciudadanos del Reino de Dios. No somos extranjeros ni forasteros, sino conciudadanos de los santos y miembros de la familia de Dios (Efesios 2:19). Esto significa que cuando Jesús regrese, viviremos para siempre con él en el cielo.

Si quieres conocer otros artículos parecidos a En El Reino De Dios Hay Residentes Temporales O Permanentes puedes visitar la categoría Prédicas.