Dios Promete Bendecirnos
Seguro que has oído el dicho: "Dios nunca nos prometió un jardín de rosas". A veces la vida es dura y dolorosa, pero Dios promete bendecirnos incluso en esos momentos. La promesa de protección y terapia de Dios proviene de su presencia con nosotros cuando estamos dolidos o nos sentimos perdidos.
Dios promete hacernos felices
Dios promete hacernos felices. Y el apóstol Pablo enseña que la promesa de Dios en este caso no es sólo una esperanza vaga y lejana, sino una realidad inmediata: "El Espíritu mismo da testimonio a nuestro espíritu de que somos hijos de Dios" (Romanos 8:16).
Dios ha prometido bendecirnos. Ha prometido estar con nosotros. Ha prometido protegernos y satisfacer nuestras necesidades (Mateo 6:25-34). La Biblia nos dice que nada puede separarnos de Su amor (Romanos 8:38-39), así que si estás leyendo esto, es porque tu vida incluye alguna medida de dolor o lucha, pero también alguna medida de alegría; después de todo, ¿cómo podrías leer algo así?
Dios promete la curación de nuestros cuerpos, así como de nuestras almas y mentes (Santiago 5:13-16; Isaías 53:5). Estas promesas son ciertas ahora mismo, no sólo cuando lleguemos al cielo algún día.
La promesa de Dios de protección y terapia
Dios promete protegernos. Salmo 91:4-5:
"Te cubrirá con sus plumas, y bajo sus alas encontrarás refugio; su fidelidad será tu escudo y tu baluarte. No temerás el terror de la noche, ni la flecha que vuela de día".
1 Pedro 5:8-9 dice:
"Vuestro enemigo el diablo merodea como un león rugiente buscando a quien devorar. Resistidle, permaneciendo firmes en la fe".
Dios promete ayudarnos cuando nos desviemos o necesitemos dirección en nuestras vidas. Dice que si le pedimos ayuda, responderá a nuestras oraciones. Él sabe lo que es mejor para nosotros porque tiene todo el conocimiento sobre todo. Es importante que confiemos en él para que podamos tomar decisiones basadas en su palabra en lugar de confiar en nosotros mismos o en otros que pueden tener su propia agenda/opiniones en lugar de su plan para nuestras vidas, ¡lo que sólo conduce al fracaso!
Dios promete estar presente
Dios promete estar presente en nuestras vidas. Dios está presente con nosotros en los buenos y en los malos momentos. Dios promete estar con nosotros cuando estamos enfermos o luchando, y promete estar con nosotros cuando estamos sanos y felices. La presencia de Dios se puede sentir por su amor, su poder, su verdad y su justicia. Es un Padre amoroso que quiere bendecirnos tanto aquí en la tierra como en el cielo.
Las bendiciones de Dios no son condicionales
Las bendiciones de Dios no se ganan. Las bendiciones de Dios no se basan en nuestro comportamiento o desempeño, sino en su propia fidelidad hacia nosotros y en su promesa de bendecirnos cuando le sigamos y le obedezcamos (1 Juan 4:19).
La bendición que viene con la confianza en Dios
Otra bendición es la confianza que tenemos en Dios. Confiar en Dios significa que dejamos de lado nuestra necesidad de controlar todo lo que sucede a nuestro alrededor. Muchas veces, no entendemos por qué ocurren ciertas cosas en nuestras vidas o cómo podrían ser beneficiosas para nosotros. Pero si vivimos por fe, creyendo que Dios tiene un plan para nuestras vidas y que nos ama profundamente y se preocupa por cada detalle, ¡entonces Él puede ocuparse de lo que necesita ocuparse!
Pero una forma de desarrollar este tipo de confianza es simplemente siendo fieles a Dios; haciendo lo que Él te pide que hagas (incluso cuando es difícil), sabiendo que Su voluntad siempre está por encima de la tuya porque Él sabe lo que es mejor para ti, ¡incluso cuando tú mismo no estás seguro!
Incluso en tiempos difíciles, Dios promete bendecirnos.
Dios promete bendecirnos, incluso en los momentos difíciles. Dios promete hacernos felices y protegernos. Él está presente en nuestras vidas, y la bendición que viene con la confianza en Él te seguirá dondequiera que vayas.
Puedes confiar en que Dios tiene en cuenta tus intereses cuando se trata de tu vida y tu futuro. Puedes estar seguro de que todo funcionará para el bien de los que le aman (Romanos 8:28). Dios quiere que experimentemos su amor y su bondad todos los días de nuestra vida, por lo que nunca te dejará ni te abandonará (Hebreos 13:5).
Conclusión
Las promesas de Dios de bendecirnos no son una sorpresa. Son lo que ha prometido y lo que siempre hará. Se basan en su amor por nosotros y en su deseo de darnos cosas buenas para que podamos disfrutar de la vida. La Biblia está llena de versículos que muestran lo mucho que Dios quiere que tengamos cosas buenas en esta vida, pero también muestra lo más importante que es que disfrutemos de la eternidad con él en el cielo.
Si quieres conocer otros artículos parecidos a Dios Promete Bendecirnos puedes visitar la categoría Prédicas.
Deja una respuesta
¡Más Contenido!