Cambio de mentalidad y crecimiento espiritual - Aspectos que necesitamos mejorar en nuestra vida
Cambio de mentalidad y crecimiento espiritual siempre irán de la mano, ya que al cambiar nuestra manera de pensar, cambia nuestra manera de proceder. El temor a Dios está en nosotros y por eso solo queremos y deseamos hacer la voluntad del Padre, tener esta actitud y aptitud nos conlleva a un crecimiento espiritual diario en Cristo Jesús, liberándonos de la esclavitud.
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Cambio de mentalidad y crecimiento espiritual - Aspectos que necesitamos mejorar en nuestra vida
Sabemos que Salomón, el hombre más sabio del mundo dijo en Proverbios 23:7 “Porque cual es su pensamiento en su corazón, tal es él. Come y bebe, te dirá; Mas su corazón no está contigo.” Cuando nuestra mentalidad y nuestro corazón no están alineados con Cristo se procede de manera deliberada sin temor a Dios, de esa forma se tiene el camino seguro a la perdición e infierno.
Ante esta verdad que es nuestro día a día, debemos tener un cambio de mentalidad y crecimiento espiritual, debemos cuidar la fuente que nos alimenta, ya que por lo general estas fuentes, está en nuestro entorno, lo que hacemos y dejamos de hacer, lo que decimos o lo que callamos, todo ello influye, para estancarnos, y hacernos esclavo del pecado o dejarnos crecer.
Características de los tipos de mentalidades
Para cambiar nuestra manera de proceder como Hijos de Dios, debemos cambiar nuestra mentalidad, y para ello debemos conocer las diferentes mentalidades que existen:
1.- Mentalidad Egipcia
Son todas aquellas personas que se revelan a ir a los pies de Jesús, actúan rechazando todo lo que tenga que ver con seguir el camino de Cristo, su actitud en la vida es mediocre, por lo general son personas sin identidad, aman la idolatría de dioses muertos, y en algunos casos idolatran a otro humano, para ellos Dios, ni el infierno y piensan que todo ha sido inventado por el hombre.
2.- Mentalidad del Desolado
Estas personas se caracterizan por ser sufridas, resignadas a los pesares de la vida, mendigan, son víctimas de circunstancias baldías las cuales no aportan nada a sus vidas, viven sumergidos en un pasado, doloroso, sin rumbo, estancando sus crecimiento mental y espiritual lo cual los aleja cada día, del camino hacia Dios, y opinan y sienten que es un castigo enviado por Dios.
3.- Mentalidad de Conquista
Es la que todos deberíamos alcanzar, o tener, porque nos permite buscar la luz, el camino a la verdad que es Cristo, soñar, desear y saber que con él, todo es posible, notemos que ya con tener a Cristo, en nuestros corazones se genera un cambio de mentalidad y crecimiento espiritual muy sublime, este tipo de personas, se destacan sin abrir sus labios, su proceder habla por ellos.
Ahora la pregunta que se debe hacer es, qué tipo de mentalidad quiero, o cuál tipo de mentalidad tengo, ya que ellas van a marcar la pauta de su vida espiritual, todos deseamos agradar a Dios, y en 1 Corintios 2:16 dice: “Porque ¿quién conoció la mente del Señor? ¿Quién le instruirá? Mas nosotros tenemos la mente de Cristo.” Si Cristo, está en nuestros corazones agradaremos a Dios.
Si Jesucristo está en nuestro corazón y mente, pensamos y actuamos de acuerdo a la voluntad del Padre, porque el hijo conoce el pensamiento de su Padre, entonces con Cristo en nosotros seremos vencedores de esas mentalidades egipcias o desoladas que solo buscan nuestro estancamiento espiritual y hacernos perder la vida eterna, que tanto desea Dios, para todos.
Es importante destacar, que esto no significa que no habrán luchas, o situaciones que intenten sacarnos del buen camino, pero si Cristo, está nosotros sabremos llevar los avatares de la vida, y no que los avatares nos lleven a la perdición, y es porque todo esto nos ha llevado a un cambio de mentalidad y crecimiento espiritual, y esto se dio, porque lo pedimos a Dios.
Si usted, decide quedarse quejándose de todo en la vida, pensando que tener estabilidad mental, física y espiritual es malo, o que para ser humilde de corazón no debe luchar por su vida, la salvación de su alma, tener sueños, no avanzará jamás, la solución para esto es que usted, vaya a un lugar que nadie lo interrumpa y le pida a Cristo que reine es su corazón, debe pedírselo.
Cambiando nuestra mentalidad
En 2 Corintios 10:45 dice: “porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas, derribando argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo,” y es porque solo obedeciendo al hijo de Dios, podremos ganar la verdadera batalla.
Debemos renovar nuestros pensamientos, destruir esos patrones de conducta que nos alejan de Dios y su justicia, esos patrones están en nuestras mentes, y para renovarlos debemos trabajar con la fuerza de Cristo, porque la nuestras no nos lo permitirá, pero le repito debe pedírselo, él nos ama infinitamente, y el amor también es respeto, aunque él, sepa que no lo hacemos bien.
Si estas palabras han llegado a ti, es porque llegó la hora de cambiar nuestra mentalidad, para que puedas tener un verdadero crecimiento del espíritu, no podemos ni debemos conformarnos con lo que tenemos, por medio de Jesús, alcanzaremos a tener una mejor vida, llena de amor, paz, salud, abundancia, dejemos la rebeldía, vayamos a los pies de Cristo, él es la ayuda idónea.
En Romanos 12:2 dice: “No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.” Todos somos merecedores de lo que es bueno, y Dios, no solo lo sabe, no los ha ofrecido siempre, solo debemos acercarnos a él, y creer en su hijo Jesús.
Cómo cambiar nuestra mentalidad
Desechando todos los pensamientos que se han incrustado en nuestras mentes y proceder, y solo lograra esto con Cristo, en su corazón y mente él sabe lo que piensa y desea el Padre Celestial, y nos llevara a cumplir su voluntad que es buena, agradable y perfecta para nuestras vidas, ahora le pregunto desea tener una vida buena, agradable y perfecta.
Una vez con Cristo, en nuestro corazón y mente oremos sin parar, es la única forma que podemos obtener una renovación completa en nuestra manera de pensar y actuar, recuerde que su lucha no es contra carne y sangre, nuestra lucha es espiritual, y al maligno no le complace, ni desea que usted reciba la voluntad de Dios, porque así lo mantienen esclavo en mente y espíritu.
Usted podría decir, pero Cristo, está en mi corazón y todo lo puedo en él, que me fortalece, lo cual es completamente cierto, y para ello debemos orar sin cesar, porque somos de carne y sangre y la debilidad de la carne, nos lleva a pecar alejándonos de Jesús, aunque sea un milímetro, lo cual es una entrada para que el maligno lo aleje kilómetros de Dios, y usted ni cuanta se dará.
Cuando sienta que le ronda en la mente un pensamiento negativo, y mal recuerdo del pasado, una crítica sin aporte positivo ya sea para usted o su prójimo, clame a Jesús, el hijo de Dios, donde este concéntrese en silencio porque es un momento de dos, usted y Jesucristo, él le ayudar y con sus ganad de querer cambiar ese pensamiento quedara abolido, esa es una victoria.
Así que hagamos de nuestro diario vivir una oportunidad para pronunciar y creer cada palabra de optimismo, de Fe, guardémosla en nuestro corazón y mente, que impregne cada célula de su cuerpo, que estas sean como el aire que respiras, de esa manera todos los días, habrá un cambio de mentalidad y crecimiento espiritual, con Cristo en usted, al final del día tendrá una victoria.
Véalo así, en una relación de padre e hijo, este le pide al padre que quiere ir al parque, lo desea y anhela, entonces el Padre, buscara el momento idóneo para que ambos disfruten de un día espectacular, una vez allí, el hijo agradecido hará su sueño y deseo realidad, disfrutar de cada máquina, espacio y el padre estará pendiente que no dañe ni se dañe, pero el hijo ejecutar cada acción.
Cuando usted le pide algo a Dios, y de acuerdo a los deseos de sus corazón él se lo dará en el momento idóneo, pero cuando el organice ese momento, usted deberá estará preparado para tomar su sueño, o correr hacia su sueño, no se quedara parado viéndolo sin hacer nada o esperando que el Padre se divierta en cada máquina del parque, es su deseo de gracias, trabaje y ejecútelo.
Por qué tener una mentalidad en Cristo nos hace crecer
Cuando Cristo esta en nuestro corazón, mente y alma, ya no pensamos desde nuestra mentes carnal, pensamos con el corazón en donde está Jesús, y cuando el hijo de Dios, mora de verdad en nosotros el cambio de mentalidad y crecimiento espiritual, es significativo, ya que Jesús, nos ayuda a realizar la voluntad del Padre Celestial, estos cambios se notan de inmediato.
Todos debemos imitar al Padre, ya que él, nos da todas las herramientas al creer en nuestro Jesucristo, al darle la prioridad en nuestras vidas, nos damos cuenta que si podemos cambiar nuestra manera de pensar, no en nuestras fuerzas, pero si en las de él, en Marcos 9:23 dice: “Jesús le dijo: Si puedes creer, al que cree todo le es posible.” Y es por la Fe, y el cambio de mentalidad.
Recordemos que Jesús vino al mundo en carne y sangre, es decir como cualquiera de nosotros, solo que jamás peco, y el por qué no peco, lo compartió siempre con nosotros, y fue porque primero él, vino hacer la voluntad de Dios, como deberíamos hacer nosotros y para ello su mente y corazón se mantuvieron en constante comunicación con el Padre, es decir orando.
El Salmo 139:23 dice: “Examíname, oh Dios, y conoce mi corazón; Pruébame y conoce mis pensamientos;” cuando escudriñamos nuestro corazón nos damos amamos a Dios, la pregunta es que nos limita a demostrar nuestro amor, cuando amas a otro ser humano quieres siempre hablarle, y cuentas las horas para verle, te esmeras en agradarle, complacerle.
Y cuando llega ese gran momento eres muy feliz, imagínese ahora que usted mantenga una comunión constante con Dios, después de todo lo que hemos aprendido de él, de lo que dice su palabra, seguro le paso lo mismo que a mí, la emoción no cabe en su corazón, cuando Dios obra, todas las puertas se abren para nuestro beneficio, los problemas se presentan, pero los superamos.
Y eso se debe a que todo lo podemos en Cristo que nos fortalece, y a que van de la mano, el cambio de mentalidad y crecimiento espiritual, esto solo lo podemos alcanzar cuando tenemos un verdadera comunión con Dios y su hijo Jesús, el verdadero secreto de muchas personas que son exitosas no está primeramente en que creen en ellos mismo, lo cual es importante y efectivo.
Existe un secreto que son pocos los que lo revelan porque saben que aquel que está en espiritualidad lo va a entender, y es que creen en el hijo de Dios, saben que reina en sus corazones y cuando Jesús, está en ti, todo lo que deseas lo puede alcanzar, multiplicar y mejorar, para la Honra y Gloria de Dios, la biblia nos lo dice, somos lo que creemos, primero creamos en Cristo.
Recordemos siempre, es necesario cambiar la mentalidad que hemos tenido desde antes de nacer, ya es hora de pensar en lo que Dios, quiere para nosotros y no en que, somos débiles y no podemos alcanzar nuestros sueños, lleve sus sueños a los pies del que todo lo puede que es Cristo, el hijo de Dios, pídale que desde ya, quiere y desea que el reine en su vida, y en su corazón.
Ese es el primer paso que daremos para cambiar esa mentalidad que nos estanca, que no, nos deja crecer espiritualmente, que no, nos deja amar sin límites, no deje de orar, de alabar a Dios, y su Poder usted puede hacerlo en intimidad, en su mente, pero hágalo, puede que estés haciendo mucha cosas pero su corazón y mente están dispuestos a orar, no los limites más.
Y sepa que sin Fe, es imposible agradar a Dios, para que entienda esto si aun le cuesta entender le pondré un ejemplo muy carnal, pero valido cien por ciento, porque todos lo hemos vivido, y no es más que el enamoramiento, qué pasa cuándo se enamora, la emoción y gusto te lleva a creer, todo lo que dice a eso le llamamos fe, y como crees, haces todo lo que te indica sin límites.
Ahora vamos al terreno espiritual, a una verdad que pocos nos damos cuenta, usted ama a Dios, dice respetarle y querer una vida eterna con él, usted y yo sabemos que no es un Dios, de palo que esta vivo que nos oye, que nos ama infinitamente, el nos busca, nos ayuda, nos respeta a tal extremo, que a pesar de ese gran amor, sino no le pedimos que entre en nuestro corazón no lo hace.
A Dios, le agradaría mucho hacernos felices, llenarnos de vida en esta tierra y en lo espiritual, pero eso depende de usted del deseo que usted tenga de cambiar su mentalidad egipcia, o desoladora, no se queje o hunda más, la solución está en sus manos, rompamos patrones de conducta, rompamos el yugo de la esclavitud y conquistemos la vida eterna con Cristo.
Para concluir quiero decirle o recordarle dos cosas, primero que usted no sabe cuándo va a morir, ni aún teniendo una enfermedad terminal, ya que el dueño de la vida y de la muerte es Dios, él nos quita la vida o nos deja unos minutos más, por eso y para ello y mucho más, es nuestro creador, y dos tampoco sabemos cuándo será la segunda venida de Cristo, el hijo del Dios, vivo.
Les digo o recuerdo esto, porque debemos vivir los segundos, horas u años de vida de una manera buena, agradable y perfecta en esta tierra, estas tres palabras son nada más y nada menos que la voluntad de Dios, para cada uno de nosotros y para hacerla debemos tener a su hijo Jesús, en nuestra vida, corazón, mente, y alma, no desperdicie su tiempo viva feliz, viva con amor.
Usted se preguntara y qué tiene que ver la venida de Cristo, con todo esto, fácil, si Cristo, no está en usted, no podrá ser arrebatado y tendrá que vivir muchas cosas desagradables e injustas hasta el día del juicio final, ante ello mejor hagamos las cosas bien, porque no sabemos cuando será nuestro último día en la tierra es hora de un cambio de mentalidad y crecimiento espiritual.
Vaya a un lugar donde nada ni nadie lo vea, viva un momento con Dios, único e inigualable, dígale Señor Jesús, te pido que entres a mi corazón, que limpies mi mente, alma y vida, quiero que seas mi único Señor y Salvador, deseo crecer en espíritu y verdad, cambia mi mentalidad y enséñame a pensar como tú, para agradara a mi creador. Gracias Padre por oírme. Su vida será nueva ya lo verá.
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Dra. Mercedes Pérez Sarrameda
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