Bosquejo Bíblico Sobre Sanidad Y Milagros

La Biblia está llena de historias de personas que fueron sanadas o ayudadas a través del poder de Dios. Aunque estos milagros pueden parecer que ocurrieron hace cientos de años, todavía hay muchos ejemplos hoy en día en los que las personas han sido sanadas de enfermedades o dolencias.

Índice de Contenido
  1. El templo - El ministerio cristiano primitivo
  2. Los relatos de curación de los Evangelios
  3. La fe, la fidelidad y la constancia en la fe La fe, la fidelidad y la constancia en la fe
  4. El triunfo de Cristo Jesús sobre los demonios
  5. La curación y los milagros
  6. La discapacidad en el Nuevo Testamento La discapacidad en el Nuevo Testamento
  7. El ministerio de curación de Pablo
  8. Conclusión:

El templo - El ministerio cristiano primitivo

El Templo era un lugar donde la gente iba a ser curada. La Biblia dice que Jesús realizó milagros en el templo y que muchas personas fueron curadas. También se dice que Jesús tenía un grupo de seguidores que se llamaban "enfermos" (Mateo 9:12). Estos "enfermos" seguían a Jesús de un lugar a otro, dondequiera que predicara o hiciera milagros.

Jesús curaba todo tipo de enfermedades, pero las que más le gustaban eran los problemas de los ojos, porque le resultaba fácil y los demás podían ver lo que ocurría cuando lo hacía. Un hombre había sido ciego de nacimiento, así que cuando recuperó la vista después de ser tocado por Jesús, ¡todo el mundo lo supo!

Los relatos de curación de los Evangelios

Jesús curó a ciegos, cojos, paralíticos y endemoniados. También curó a personas con lepra, fiebre y enfermedades crónicas; devolvió la vista a los ciegos de nacimiento; curó el dolor de oídos (Marcos 7:32); dio audición a los que habían sido sordos; curó úlceras en manos o piernas que habían durado años (Mateo 12:10).

Devolvió el habla a un hombre mudo de nacimiento (Marcos 7:35) y purgó a una mujer de sangre durante doce años (Mateo 9:20). Los evangelios recogen muchos más milagros sorprendentes realizados por Jesús.

La fe, la fidelidad y la constancia en la fe La fe, la fidelidad y la constancia en la fe

La fe que Dios nos ha dado es un don de curación y de milagros. No es nuestra; ¡es suya! Nos la dio para que podamos recibir de Él lo que sólo Él puede dar: avances financieros sobrenaturales, curación física, integridad emocional y restauración espiritual.

El triunfo de Cristo Jesús sobre los demonios

Después de que Jesús regresara al cielo, la iglesia siguió creciendo. De hecho, creció a un ritmo tan rápido que los demonios se enfurecieron y comenzaron a atacar a los cristianos que vivían en las ciudades. Estos ataques resultaron en la muerte de muchas personas al ser debilitadas físicamente por el poder del demonio. Este fue un ejemplo de cómo Satanás estaba usando el poder demoníaco sobre la gente, ¡y todavía sucede hoy!

La solución a este problema no se encontró en ninguna medicina u otro trabajador milagroso, sino sólo en Jesús. Por medio de su muerte en la cruz y su resurrección de la muerte, venció todos los poderes que vienen contra nosotros (Efesios 6:12).

Como resultado de su victoria sobre la propia muerte a través de su resurrección de entre los muertos, podemos decir con valentía que no importa lo que ocurra o la enfermedad que nos sobrevenga -incluso si nuestra vida parece bastante desesperada- siempre hay esperanza porque Jesús ya ha vencido todo lo que viene contra nosotros.

La curación y los milagros

Los apóstoles eran sanadores y hacedores de milagros. Sanaban a los enfermos y expulsaban a los demonios, hacían milagros para demostrar la verdad de su mensaje, y lo hacían para confirmar que Jesús estaba vivo después de su crucifixión.

La discapacidad en el Nuevo Testamento La discapacidad en el Nuevo Testamento

La Biblia está llena de historias sobre la curación por parte de Jesús de personas con discapacidades. Sanó a los ciegos, a los sordos y a los cojos. También sanó a personas enfermas o poseídas por demonios. En un caso particular en los Evangelios de Lucas y Mateo, incluso sanó a un leproso (una persona que había sido declarada impura).

Jesús también curó a muchos que sufrían dolencias físicas, como la parálisis. En este pasaje del capítulo 9:1-8 de Mateo vemos cómo Jesús cura a dos paralíticos diferentes.

El ministerio de curación de Pablo

El ministerio de sanación de Pablo es uno de los aspectos más sorprendentes, aunque menos comprendidos, de su vida. El hecho de que Dios utilizara a este hombre para sanar a miles de personas mediante la imposición de manos es un testimonio del poder de Dios y de su voluntad de utilizar a aquellos que están dispuestos.

El ministerio de Pablo era diferente al de los discípulos, que ministraban principalmente a través de milagros y señales (Marcos 16:20; Juan 14:12). El ministerio de Pablo se diferenciaba del de ellos en que a menudo no pedía un milagro antes de orar por la curación. Simplemente pedía a la gente que creyera en Jesucristo como Señor y Salvador y luego les prometía que si creían, serían sanados (Hechos 14:9-10).

La capacidad de Pablo para sanar era tan grande que muchos pensaron que tenía un poder divino del propio Dios (Hechos 19:11-12). Esto hizo que algunos cristianos de hoy en día, que dudan de si los milagros de Jesús eran reales o sólo historias contadas por los apóstoles que trataban de ganar dinero a costa de ellos, piensen dos veces en lo que creen hoy en día, porque si Pablo podía sanar con tanta facilidad, ¿por qué nosotros no podemos?

Conclusión:

Hay varios ejemplos de curaciones y milagros en la Biblia. Jesús sanó a muchas personas utilizando la fe, la oración y el ayuno. Si tienes una dolencia o enfermedad específica, pídele a Dios que te ayude rezando y pidiéndole que te sane. También puedes ayunar de comida durante unos días para mostrar tu voluntad de renunciar a las cosas que puedan estar impidiendo tu curación.

Si quieres conocer otros artículos parecidos a Bosquejo Bíblico Sobre Sanidad Y Milagros puedes visitar la categoría Estudios Bíblicos.

¡Más Contenido!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Subir